Datos: Love it? Or list it?
¿Te has preguntado alguna vez cuántos registros se generan cada día en tu empresa? Fichadas, albaranes, facturas, artículos… Miles y miles de filas se almacenan a diario en las infraestructuras de la compañía.
Seguro que en alguna ocasión, al querer obtener una información concreta para tomar cualquier pequeña o gran decisión, ha sido necesario dedicarle mucho tiempo y recursos.
Actualmente el conjunto de las empresas conserva una cantidad infinita de información a gestionar. A menudo, no somos conscientes del valor que puede tomar la información que almacenamos si la utilizamos correctamente.
Todas las personas tomamos decisiones en nuestro día a día. Y todas son importantes en su contexto. El miedo que tenemos siempre es si acertaremos. ¿Estamos escogiendo la mejor opción, o nos estamos equivocando? Siempre tendremos un margen de error, pero éste se reduce cuando la decisión se toma de acuerdo con los datos utilizados y contextualizados correctamente.
En 2020 ha significado el colmo de un entorno cambiante marcado por la pandemia y los cambios en las restricciones y la legislación constantes. Todas las empresas han adaptado sus procedimientos e incluso su core business para seguir adelante y adaptarse. Fue un entorno totalmente imprevisible que requirió movimientos rápidos de adaptación y decisiones tomadas de forma acertada.
En esta coyuntura, los datos juegan un papel clave. Obtenerlas de forma ágil y robusta, contextualizarlas y definirlas de forma óptima para interpretarlas fácilmente junto a la accesibilidad, es una combinación perfecta. Y no sólo en situaciones de extrema complejidad y delicadeza sino en cualquier momento.
Tener como base estas premisas en los ejes fundamentales de la estrategia de datos contribuirá a un elevado nivel de conocimiento de la compañía y del contexto en el que se encuentra así como a la anticipación de la organización a situaciones de futuro y, un futuro cercano que requerirá medir más allá de los resultados económicos, financieros y productivos de la empresa.
Las herramientas de Business Intelligence son el vehículo a través del cual se materializa la estrategia de datos. Cada vez más, las empresas apuestan por el uso de estas aplicaciones, accesibles e intuitivas para la gestión de la información.